Centro de salud, pero no a 57 kilómetros

El presidente de la Fundación, izda. visita  los terrenos

La Fundación inició hace unos meses el proyecto del Centro de Salud Comunitaria (CSCOM) de Dougabougou, localidad del centro de Mali, con un coste total de 53.568 euros, de los cuales la Fundación Polaris aportará 49.751 euros. Dougabougou, perteneciente a la parroquia de Markala, en la diócesis de Segou, cuenta con 17.301 habitantes y está localizado en una zona relativamente desértica, salvo por el paso del río Níger. 

En una primera fase, el CSCOM estará compuesta de tres secciones: medicina general para hombres y mujeres; maternidad y pediatría; edificio administrativo y farmacia. Los colectivos que se verán beneficiados por este proyecto son tanto la población de Dougabougou como la de los alrededores.

Dougabougou es, esencialmente, una ciudad obrera. Debido a la existencia de la mayor azucarera del país, también hay un gran número de funcionarios. Debido al cierre de algunas industrias estatales, el paro  se ha incrementado notablemente en los últimos años. La construcción de este Centro de Salud mejorará las condiciones de la población de Dougabougou y sus alrededores, de manera especial, los más necesitados, la población infantil y las embarazadas. Se facilitará, de este modo, el acceso a cuidados mínimos de las personas más pobres y los indigentes de la ciudad. Permitirá a la población de Dougabougou y alrededores el acceso a cuidados sanitarios adecuados, sin tener que recorrer grandes distancias.

En Dougabougou no hay centro sanitario. Para recibir cuidados médicos, aquellos que pueden se desplazan a Segou (a 57 km.) o bien a Markala (situada a 22 km.) donde hay un centro de salud bastante mal equipado. Como la zona es de una extremada pobreza, los obreros, por falta de medios, ni siquiera se pueden desplazar. Para solucionar estas dificultades, las autoridades locales han recurrido en numerosas ocasiones a Cáritas, que por falta de medios no ha podido desarrollar el proyecto.

Las autoridades políticas han apoyado la idea desde el principio, cediendo los terrenos para la construcción del CSCOM, terreno visitado por el presidente de Fundación Polaris en febrero de 2010. En la actualidad, todos esperan con impaciencia que este anhelado proyecto, por tantos años esperado, llegue a buen puerto. Se pondrá en marcha un sistema de gestión para conseguir que el centro se financie por sí mismo. Se prevé que el constructor entregue las llaves el 30 de junio de este año.