El compromiso de 240
asistentes presenciales, sumados a los 33 participantes mediante la Fila Cero
permitirá que la Fundación Polaris World complete la edificación del
dispensario de Minta, en el noroeste de Mali, una remota aldea pegada a la
frontera con Burkina Faso. En efecto, durante la reciente celebración de la IX
Cena Benéfica de la Fundación, tal y como señaló el presidente de la misma,
Narciso Lozano, estos son los muros que África necesita, los de la solidaridad
manifestado en las paredes del dispensario, cuyo progreso de la construcción
se puede observar en este [Album
fotográfico]
El presidente explicó
con unas cuantas imágenes el desarrollo y ejecución de los proyectos que la
Fundación lleva a cabo, esencialmente en Mali. El dispensario de Minta
representa el número 112 de los ejecutados, en torno a los 50 en este país de
África Occidental. A veces, por la distancia y las dificultades de acceso, la
ejecución de los proyectos no es sencilla. Por poner un ejemplo, en el caso del
Centro de Salud de Minta, algo tan sencillo como acarrear la arena, pese a que
estamos en pleno desierto, tiene que hacerse desde unos 15 kilómetros. Algo
parecido ocurre con el agua necesaria para fraguar el cemento y las bovedillas.
En su undécimo
aniversario, la Fundación volvió a concitar la solidaridad de numerosos amigos
y simpatizantes. En total el beneficio neto de la cena se elevó a 12.830 €, de
los cuales 3.390 € fueron generados por la rifa de los numerosos regalos
donados por benefactores. Mención especial merece La Herencia Salón
Celebraciones que, además de un exquisito servicio, realizó una importante
aportación al proyecto.
El Centro de Salud,
cuyo coste está presupuestado en 36.500 euros, financiados en su totalidad por
la Fundación Polaris World, tendrá el compromiso, como está ocurriendo en los
otros ocho actualmente en funcionamiento, de contratar, primeramente, auxiliar
de enfermería cualificado y una comadrona, así como disponer de un pequeño
stock de medicinas pagado por la población local. En un plazo de,
aproximadamente, dos años, el Gobierno asumirá el usufructo del Centro de Salud
de Minta dotándolo, previsiblemente de un médico con visitas rotatorias.
Aunque las necesidades
no quedarán cubiertas del todo, el dispensario más próximo se encuentra a 21
kilómetros, siempre con el hándicap de caminos intransitables, especialmente
desde junio hasta noviembre, durante la estación de lluvias, al menos las 12
aldeas que junto con Minta (Dissa, Oufou, Zerema, Saye, Boila, Djinto, Mangan,
Boussouré, Anakana, Domini y Molé) sentarán las bases para una asistencia
sanitaria elemental con perspectivas de mejorar notablemente a corto medio
plazo.
La parte más frágil de
la población, embarazadas y bebés, encontrarán un espacio para mejorar sus
posibilidades de supervivencia (la tasa de mortalidad suele superar los 100
niños por cada 1.000 habitantes). El Comité Local, conformado por
representantes de las 12 aldeas, se encargará de que el proyecto llegue a buen
puerto.
Imagen cortesía de R.F. |
La Fundación Polaris
World ha decidido construir un centro de salud, siguiendo el modelo de los
otros ocho ya edificados y en funcionamiento en la zona. Los lugareños tienen
dos exigencias, colaborar en especies, mediante mano de obra o alojando a los
albañiles y que la edificación respete la arquitectura popular local.
El modelo de centro de
salud que ha implantado la Fundación Polaris World en el país dogón consiste de
tres módulos. Uno, más pequeño, hace las funciones de despacho para el personal
médico, archivos y farmacia. Un segundo módulo sirve para la consulta de los
enfermos y un tercero se convertirá en maternidad, preservando una cierta
intimidad para las parturientas en unas condiciones sanitarias mínimamente
dignas. Actualmente dan a luz en sus casas, sobre piso de tierra.